El Horizonte Templario
Templario y Caballero… en la cercanía y en el horizonte. En la batalla y en la oración. En la calma y en la tempestad. Con tu Fe y con tu baussant. Convencido y seguro de tus tácticas, estudiando y analizando hasta el más mínimo detalle para salir victorioso de tus batallas.
Asumiendo la responsabilidad y siendo consciente de la importancia que para la humanidad tiene ganar esta guerra de paz, que es inevitable y necesaria, sin más demora, pues el tiempo de Dios Nuestro Señor, no se hace esperar jamás.
Templario… los gobiernos que toman decisiones y dirigen el mundo cada vez son más débiles e inestables, debido a los sistemas de dirección que ellos mismos han elegidos. Se encuentran perdidos y sin ideas de cómo salir de cada conflicto que ellos mismos crean y alimentan.
Las religiones han venido haciendo dejadez de sus funciones debido a la inmensa carga de engaños y traiciones que a través del tiempo han ido acumulando y que se han convertido en una carga insoportable de seguir aguantando, sucumbiendo de una forma vergonzante a las tentaciones de una forma de vida sin Virtudes ni Principios, vergonzosa y lujuriosa.
Ya no se consideran templos sagrados dedicados al culto y a la oración, sino que actúan y funcionan como simples sucursales de una gran empresa financiera y económica.
Las monarquías en otros tiempos, poderosas y respetables, hoy son el hazmerreír de todos los ciudadanos. Aisladas por cercas y barreras dentro de sus palacios, son conscientes de que se les ha terminado el cuento. Ya no habrá bailes de salón para sus princesas.
Caballero y Templario… el Olmo está viejo y cansado, pero sigue estando en pie y recto, observando el horizonte, esperando y deseando que tú, Templario, le traiga savia nueva de vida Templaría, inundando su tronco seco del espíritu guerrero que emana del Templo de Dios, y poder gozar de todas tus victorias en bien de la humanidad y para mayor Gloria de Nuestro Señor.
+++Nada para nosotros, Señor, nada para nosotros, sino a Tu nombre sea dada la Gloria.+++