La Estructura de la Orden del Temple

La Estructura de la Orden del Temple

La estructura y organización de la Orden del Temple quedó fijada en 1163 . Todos se hallaban bajo las órdenes del Maestre del Temple de Jerusalén. No obstante, éste debía atenerse al voto de la mayoría, es decir, al Capítulo para decidir las cuestiones más importantes: nombramientos de los distintos comandantes de las provincias, declaraciones de guerra, firmas de armisticios, el acoso a una fortaleza y hasta la recepción de un nuevo hermano.

Dirección de la Orden

Maestre

Solo respondía a la autoridad del Papa, aunque debía ser respetuoso con los obispos y con los reyes. Disponía de cuatro monturas, además de una especial para el combate. Como ayudantes, contaba con un secretario e intérprete árabe, un soldado de caballería ligera, un herrero, un cocinero y dos criados de a pie.

Senescal

Segunda autoridad del Temple, suplía al Maestre en sus ausencias.

Mariscal

Mandaba a los Templarios en la guerra y el combate si el Maestre no estaba presente.

Comendador de la Tierra de Jerusalen

Tesorero y gestor de las finanzas de la Orden. Era, asimismo, el jefe de la marina templaría y guardaba la Vera Cruz en las batallas. Se encargaba en la ciudad santa de la protección de los peregrinos y de la vigilancia de los caminos, que eran los fines fundacionales del Temple.

Vestiario

Encargado de la uniformidad de los caballeros, escuderos y sirvientes. Asistía a las ceremonias de iniciación.

Comendadores Territoriales

Estaban en Palestina (Acre) y Siria (Antioquía). De ellos dependía el conjunto de castillos de cada región.

Turcoplero

Jefe de la caballería ligera indígena, que formaba el escuadrón de los turcopolos.

Comendadores Provinciales

Preceptores de las diferentes provincias en las que se dividía las Orden. Se encargaban de administrar las donaciones, cuidar de los hermanos que tenían a su cargo y debían enviar la mayor cantidad de dinero posible a Tierra Santa.

Clases de Combatientes

Caballeros

Flor y nata del cuerpo de guerra templario. Eran los únicos con derecho a portar el manto blanco con la cruz roja pattée, que se cosía al lado izquierdo del pecho, y ya avanzado el siglo XII se portaba también en el escudo. Disponían de tres o cuatro caballos para utilizarlos, si era preciso, sucesivamente.

Sargentos

Servían a los caballeros y se diferenciaban de estos en que vestían con túnica parda o negra, con la cruz roja en el hombro izquierdo.

Escuderos

También armados y a caballo, aunque no tan poderosamente como los caballeros.

Sirvientes

Formaban, con escuderos y caballeros, el grueso del ejercito templario. Portaban armamento ligero y se ocupaban de los caballos del caballero. Apoyaban a este con sus arcos y le protegían.

Turcopolos

Caballería ligera de cristianos nativos, que colaboraban con la Orden, aunque no formaban parte de ella. Era, por tanto, un cuerpo militar auxiliar.

Caballeros Seglares

Caballeros que hacían el voto de peregrinación y se ponían voluntariamente al servicio del Temple, generalmente por un tiempo limitado. Estos caballeros vivían en los conventos de la Orden, excepto si estaban casados y sus mujeres se encontraban en Tierra Santa, en cuyo caso residían fuera de los recintos religiosos.

Clases Sacerdotales

Abad del Temple

Residía en Jerusalén, y era el superior de toda la división monacal de la Orden, que podía considerarse totalmente independiente de la militar.

Sacerdotes

También llamados capellanes. Asumían solamente funciones religiosas y de atención espiritual a las demás clases templarías. Se encargaban asimismo del cuidado de las iglesias.


El contraste más evidente entre los sacerdotes y las clases combatientes era de tipo cultural. Los caballeros templarios (así como escuderos y sirvientes) carecían por lo general de educación y cultura, y eran con frecuencia (incluso varios de los maestres, como el último, Jacobo de Molay) analfabetos. Los clérigos en cambio, estaban muy bien preparados en las escuelas catedralicias, monásticas e incluso en las universidades.

Cuerpos Auxiliares

Hermanos Legos

Desempeñaban funciones domésticas. También conocidos como «donados».

Compañeros del Santo Deber

O compañeros de oficios. Carpinteros, constructores, etc. Vivían en los establecimientos templarios (castillos, conventos) y estaban vinculados a la Orden. Se encargaban, bajo la dirección de un Templario de cualquier grado, de la edificación y mantenimiento de los castillos y edificios de encomienda. Se incluyen aquí a los agricultores, que generalmente no pertenecían a la Orden, sino que eran contratados por ella en condición de siervos y ocasionalmente, de esclavos.

Cooperadores

Personas que admiraban a la Orden del Temple y la ayudaban, fuera de la vida conventual. Era la única clase en donde podían colaborar las mujeres. Se organizaban de forma autónoma.

¿Cuántos eran los Templarios?

En caballería pesada, una lanza u hombre de armas consistía en un total de cinco combatientes: el caballero principal, dos escuderos y dos sirvientes. Es por ello, que no significa lo mismo un hombre de armas que un caballero, por lo que la estimación de los efectivos templarios tanto en Ultramar como en Europa no es tarea fácil, ya que, muchas veces, las fuentes no realizan tal distinción, variando entre los trescientos caballeros de algunas, hasta los cien mil combatientes de otras.

La cifra más aceptable y más divulgada, sitúa un número de combatientes en Tierra Santa en torno a los diez mil efectivos, de los cuales un millar largo serían caballeros plenos. Si tenemos en cuenta la veintena de fortalezas templarías en la zona, saldría una media de una guarnición de quinientos hombres por castillo, cifra bastante razonable.

La Estructura de la Orden del Temple en Occidente, en el conjunto de sus establecimientos, se rebasaría muy probablemente ese número, aunque vivían dispersos por los establecimientos de las ciudades y el medio rural.

El conjunto de las casas y encomiendas de la Orden en Europa occidental ascendería a unas mil, con más de la mitad en Francia, lo que indicaría un número de caballeros en torno a los cuatro mil, a los que se deben agregar los templarios de todas clases y los cooperadores, muy numerosos, estableciendo un total de cuarenta mil personas aproximadamente.

+++Nada para nosotros, Señor, nada para nosotros, sino a Tu nombre sea dada la Gloria+++

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antolinvall
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Un comentario

  1. Interesante, Soy Mason, y siempre he pensado q estan los devotos a Dios,los Santos… Pero ademas.debe haber hombres d sangre caliente q adoran a Dios pero son operativos. Ellos fueron y son Los Templarios.

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