¡¡¡Sangre Templaria!!!
“Ningun Tiempo es pasado mientras permanezca guardado en nuestra mente y en nuestro corazón” (Antolin Vall).
Derrama tu sangre Templaria por los ríos y montañas, a ver si de una vez se enteran que la Orden del Temple es Sagrada. Muchos quieren verte muerta y yo quiero darte vida. Ya suenan las espadas por los campos de batalla. Una guerra de siglos, de combatientes.
Maldita mil veces malditas sean, las voces que dictaron sentencia, para quemar en el fuego las almas más puras y bellas.
“Un total de 117 cargos condenaron finalmente a la Orden del Temple, durante el proceso.”
La ramera del Imperio y un rey avaro quisieron poner fin al Propósito mas Santificado. El Palacio de la secta «buena» habitado por los mayores usurpadores de la Palabra de Dios.
Derrama tu sangre Templaria por los pueblos y ciudades, que están matando a tu Patria meapilas, ladrones y farsantes.
Lo siento Templario lo siento, se acabaron los silencios, tantos guerreros con capa y espada y ninguno se rebela.
Que caigan rayos y truenos y desenvainen las espadas, para derribar todo lo que se levante contra Dios. Que sepan que has vuelto Templario, porque con la Orden del Temple no se mercadea, ni se mancilla su Honor.
“Se arman en su interior con la fe y al exterior con acero, sin dorado alguno; armados no adornados, infunden miedo y no avaricia”.
Que vuele alto, muy alto, el bausant y la bandera. Que la vean los enemigos y de miedo se estremezcan. Que bailen los caballos, que bailen, que rueden las cabezas y que la sangre riegue la tierra
Que suene muy fuerte, que suene el grito de guerra, que por la Orden del Temple entregarías, Templario, tu vida entera.
“Llevan caballos fuertes y ligeros, no importa el pelo ni sus aparejos, piensan en el combate y no en el lujo. Anhelan la victoria no la gloria; desean ser temidos no admirados”.
Benditos sean por siempre en el Cielo y en la Tierra los corazones sedientos, por ser algun dia Templarios y Caballeros, formando parte como soldados del renacer de Los Pobres Caballeros del Templo y Milicia de Cristo, nuestro único Rey y Señor.
Perdona, Templario, perdona si duelen las verdades. Caído con honor y vencido a mi Dios por una palabra suya, por una sola palabra Templario. La Palabra es Amor. Un mundo, una sola Fe… para mayor Gloria de Nuestro Señor.
«Templi Ómnium Hominum Pacis Abbas»
+++Nada para nosotros Señor, nada para nosotros, sino a Tu nombre sea dada la Gloria»+++